Científicos estadounidenses lograron reducir los niveles de azúcar en sangre de ratones diabéticos al emplear una técnica que transforma células comunes del páncreas en células productoras de insulina. El método se basa en el empleo de un virus que transporta e inserta genes específicos confiriéndole nuevas funciones a las células. Los resultados no tendrán aplicaciones médicas inmediatas.

(03-09-08 -Agencia CyTA-Instituto Leloir) – Mediante una técnica llamada \”reprogramación directa\”, científicos del Instituto Médico Howard Hughes (HHMI, según sus siglas en inglés), en la Universidad de Harvard, lograron convertir células comunes del páncreas en unidades productoras de insulina en ratones diabéticos.

El trabajo, publicado el 27 de agosto en Nature, señala que el experimento convirtió cerca del 20 por ciento de las células exocrinas (especializadas en generar una variedad de enzimas digestivas), que componen el 95 por ciento del páncreas, en células betas productoras de insulina. Como consecuencia de ello hubo una reducción de los niveles de azúcar en sangre en los ratones. El estudio estuvo dirigido por el doctor Douglas Melton.

De acuerdo con un comunicado de prensa del HHMI, es la primera vez que los investigadores lograron cambiar la identidad funcional de las células adultas sin usar células madre embrionarias o técnicas que revierten la programación genética de la célula a sus primeros estadios, para luego diferenciarlas en células especializadas que pudieran reparar nervios, corazones u otros órganos dañados.

“Esto demuestra que se puede ir directamente desde un tipo de célula adulta a otro, sin volver al principio”, afirma Melton. Y agrega: “Se podría decir, por ejemplo, que es como transformar a un científico en un abogado sin enviarlo de nuevo al jardín de infantes”.

Cambio de identidad celular

Melton y sus colegas transformaron las células comunes del páncreas en células productoras de insulina usando un virus que transportó tres genes reguladores (Ngn3, Pdx1 y Mafa) al genoma de esas células.

Pese a que el trabajo es alentador, Melton señala que los resultados aún no tendrán aplicaciones médicas a corto plazo. Por el momento se trata de una investigación de ciencia básica.

Tal como indican los autores del estudio, aún quedan preguntas por responder. Algunas de ellas son: ¿Qué otros tipos de células se pueden convertir en células betas? Dado que el uso de virus para transportar genes a pacientes humanos acarrea riesgos, ¿se puede lograr el mismo resultado con productos químicos u otras drogas?

Si bien este trabajo abre un campo nuevo de investigación, Melton asegura que los resultados obtenidos no invalidan de ninguna manera la necesidad de seguir investigando otras estrategias como aquellas que se basan en células madre obtenidas de embriones humanos o las que revierten la programación genética de la célula a sus primeros estadios a fin de lograr su especialización.