Un estudio, realizado en Costa de Marfil, muestra que los monos Campbell emiten seis tipos de llamados que combinan en diferentes secuencias para generar mensajes diversos. De acuerdo con una bióloga argentina el trabajo representa un punto de quiebre en el estudio y en la comprensión del lenguaje de los primates no-humanos.

(27/01/10 – Agencia CyTA – Instituto Leloir).- Luego de realizar varios experimentos y estudios de campo, un equipo internacional de investigadores logró descifrar gran parte del complejo y sofisticado lenguaje de los monos Campbell, cuyo nombre científico es Cercopithecus campbelli. Se distribuyen en las costas de noroeste de África desde Gambia hasta Ghana. Habitan bosques y se alimentan principalmente de frutos e insectos.

El trabajo, que fue publicado en la revista científica Proceedings of the National Academy of Sciences, indica que esos primates no humanos emiten seis tipos de vocalizaciones de alerta que varían de acuerdo al contexto.

Los monos fueron objeto de estudio en el parque nacional Taï de Costa de Marfil y el trabajo fue realizado por investigadores de las universidades de Rennes (Francia), St Andrews (Escocia) y Cocody-Abidjan (Costa de Marfil).

Consultada por la Agencia CyTA sobre este trabajo Silvana Peker, becaria doctoral de Conicet de la Estación Biológica de Corrientes, dependiente del Museo Argentino de Ciencias Naturales “Bernardino Rivadavia”, señaló: “Los machos adultos de los monos Campbell producen vocalizaciones que se pueden escuchar a grandes distancias. Las vocalizaciones pueden producirse en contextos específicos, como por ejemplo, para requerir la cohesión grupal (cuando el grupo se desplaza largas distancias), alertar ante la caída de árboles, la presencia de grupos vecinos o la presencia de depredadores.”

Los autores del estudio clasificaron seis tipos de llamados en base a su estructura acústica, cada uno con un significado específico: Boom, hok, krak, krak-oo hok-oo y wak-oo.

Lo notable es que, según explica Peker, “esas vocalizaciones pueden combinarse en secuencias diferentes para transmitir un mensaje distinto al que producen cada una por separado”.

Para identificar los significados de esas secuencias de vocalizaciones los investigadores, observaron a los monos durante mucho tiempo. Estudiaron sus respuestas vocales cuando eran amenazados por águilas o leopardos. Asimismo realizaron experimentos empleando leopardos y águilas disecadas así como también experimentos acústicos usando parlantes que amplificaban gritos o gruñidos de leopardos y águilas, entre otras técnicas.

“Algunos llamados de alarma anuncian al resto del grupo la presencia de un potencial depredador. Los llamados brindan al grupo la posibilidad de defenderse o huir del depredador, y cuanto más especifica sea la información incluida en el mensaje de alarma, mayores son las posibilidades del grupo de sobrevivir al potencial ataque”, indica Peker. Y agrega: “Los llamados de alarma están enmarcados dentro de los comportamientos cooperativos que realizan los primates no-humanos. Las vocalizaciones pueden llegar a ser muy costosas para los individuos que las realicen, ya que dar la voz de alarma puede implicar que el ejecutante sea detectado por los depredadores.”

Sobre este trabajo expertos del Centro de Investigaciones Científicas de Francia -que participaron en la investigación- puntualizan que la habilidad de esta especie de monos de combinar vocalizaciones debe haber aparecido a lo largo de su evolución para compensar su limitada flexibilidad vocal, “si se tiene en cuenta que tienen una flexibilidad vocal menor en comparación con los pájaros y los cetáceos.”

“El trabajo representa un punto de quiebre en el estudio y en la comprensión del lenguaje de los primates no-humanos. Recientemente el comportamiento vocal de los primates no-humanos no era considerado relevante para el estudio de la evolución del lenguaje humano”, subraya Peker. Y continua: “En el estudio a largo plazo realizado en el Parque Nacional Taï en Costa de Marfil, los investigadores concluyen que los monos Campbell poseen una forma de proto-sintaxis (combinatoria de unidades gramaticales que generan significado en la comunicación). La sintaxis era considerada una característica exclusiva de los seres humanos. Asimismo este trabajo presenta nueva información para el estudio y la comprensión de la compleja comunicación y los sofisticados comportamientos cooperativos en los primates-no humanos”.

Por otra parte, la bióloga argentina señala que los autores son prudentes en la comparación entre los monos Campbell y los humanos en lo concerniente a la comunicación. “La diferencia fundamental entre la forma de comunicación de los monos Campbell y los humanos es que en estos monos sólo se registraron llamados en respuesta a experiencias reales, mientras que el lenguaje humano es simbólico. El emisor puede enviar una señal al receptor acerca de referencias que no están físicamente presentes”, asegura.

MONA

Los monos Campbell, cuyo nombre científico es
Cercopithecus campbelli, se distribuyen en las costas de noroeste de África desde Gambia hasta Ghana.

Crédito: A. Laurence

MONOS 1

Los monos Campbell emiten seis tipos de llamados que combinan en diferentes secuencias para generar mensajes diversos.

Crédito: F. Moellers