Por segunda vez consecutiva, la médica argentina Mirta Roses asumirá como Directora Regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud. En su nuevo mandato, la funcionaria espera poder aunar esfuerzos para mejorar la situación sanitaria de los más postergados y vulnerables.

(28/01/08 – Agencia CyTA_Instituto Leloir) – La semana pasada el Consejo Ejecutivo de la Organización Mundial de Salud (OMS) volvió a elegir a la argentina Mirta Roses como Directora Regional para las Américas. De esta manera, la sanitarista recibida en la Universidad Nacional de Córdoba, comenzará su segundo mandato consecutivo de cinco años en ese puesto. La ceremonia de jura se realizará este viernes, 1 de febrero, en Washington (EE.UU.).

Para felicitar a la doctora Roses, Margaret Chan, directora general de la OMS expresó: “Creo que la gente de las Américas es afortunada en tener una líder tan dedicada cuidando su salud, y sobre todo, haciendo eso de una manera que busca soluciones justas, equitativas y sostenibles a las necesidades. Esto, por supuesto, está en el corazón del acercamiento primario del cuidado médico. Espero que tengamos una colaboración más cercana con Mirta en los próximos años”.

Por su parte, Roses dijo: “A lo largo de más de un siglo de fructífera vida, la OPS (Organización Panamericana de la Salud) ha sabido desempeñar un papel esencial para mejorar la salud de todos los pueblos de la Región. Por ello, es un motivo de orgullo continuar encabezando este equipo de trabajo solidario, competente y comprometido, que ha sido capaz de contribuir a esos enormes logros y está preparado para responder a los nuevos desafíos de salud pública de nuestra época”.

La doctora Roses ingresó a la OPS/OMS en 1984 como coordinadora de la Unidad de Epidemiología del Centro de Epidemiología del Caribe en Trinidad y Tobago. Luego continuó su tarea en República Dominicana y en Bolivia antes de ser nombrada como directora auxiliar de la OPS en 1995. Pero fue en 2002 cuando finalmente fue elegida como directora de la organización, conviertiéndose en la primera mujer en llegar a ese cargo en la centenaria organización.

“Cada vez es más evidente el carácter global de las grandes amenazas para la salud. No existe país o región, con independencia de tamaño, nivel de desarrollo o ubicación geográfica, que pueda afrontarlos aisladamente –señaló Roses–. La interdependencia cada vez más visible que es propia de este nuevo siglo ha cerrado la brecha entre lo local y lo global, lo individual y lo colectivo. En consecuencia, sólo si articulamos nuestras acciones y creamos redes a partir de múltiples esfuerzos, podremos afrontar los riesgos a los que están expuestos los grupos más vulnerables”.

“Los seis objetivos centrales de la agenda de la OMS, a saber, promover el desarrollo, impulsar la seguridad sanitaria, fortalecer los sistemas de salud, basar nuestras intervenciones en evidencia científica, forjar alianzas y mejorar el desempeño organizacional, son también propósitos fundamentales de nuestro accionar en el nivel regional. Confío plenamente en que, todos juntos, continuaremos avanzando y colaborando con los demás países y regiones para afrontar con éxito los desafíos sanitarios globales y conseguir la elevación de los niveles de bienestar, paz y desarrollo, como esperan, demandan y merecen los más postergados y vulnerables”, concluyó la funcionaria.