La publicación CHicos, de la Asociación Civil Ciencia Hoy, pone de manifiesto una tendencia emergente de la divulgación científica: transmitir en lenguaje adecuado para la edad “los últimos descubrimientos y las tecnologías que se vienen”.

(04/01/2016 – Agencia CyTA-Instituto Leloir)-. El descubrimiento de un colosal titanosaurio en Chubut, una recorrida microscópica por la cocina a la caza de bacterias, la importancia de la luz en nuestras vidas, qué es la nanotecnología, qué ocurre con la basura después que la tiramos al tacho y qué son los cazadores de robots en Internet, son algunos de los temas que se despliegan en la nueva publicación de la Asociación Civil Ciencia Hoy: CHicos. La iniciativa confirma una tendencia creciente durante la última década: posicionar a los niños y adolescentes como un “target” de los esfuerzos de la divulgación científica.

“La idea de la CHicos es cubrir una vieja necesidad: que los chicos puedan acceder a una publicación que les acerque la ciencia en un formato adecuado para ellos, respaldada por un equipo de científicos, pedagogos, colaboradores y hasta por los mismos chicos, que tienen la palabra final en cuanto a si el tema les resulta interesante o suficientemente claro”, señaló la editora de la publicación, Paulina Nabel.

Durante la última década, otros proyectos exitosos en el país apuntaron a acercar el conocimiento de la ciencia a ese segmento de edades. Desde 2003, Expedición Ciencia, una asociación civil integrada por científicos y educadores, organiza “campamentos científicos” para estudiantes secundarios de todo el país. Dirigida por una física y una bióloga, Ediciones Iamiqué publicó desde 2001 decenas de libros de divulgación científica infantil interesantes, rigurosos, bellos, creativos e innovadores. En el Polo Científico Tecnológico de Palermo, el recién inaugurado Centro Cultural de la Ciencia (C3) busca promover la cultura y el pensamiento científico en el público general y escolar mediante experiencias interactivas.

Esta modalidad de difusión de la ciencia exige conductas responsables. En 2013, especialistas firmaron en Lodz (Polonia) una declaración que enfatiza algunos requisitos que deberían satisfacer estas iniciativas, tales como que la ciencia puede ser divertida, pero también se debe invitar a los niños y a los jóvenes “a participar en discusiones sobre ideas difíciles y desafiantes.” Además sostienen que esos grupos etarios merecen la oportunidad de comprender las diferencias entre la realidad de la ciencia y las imágenes idealizadas, como a menudo se retrata en los medios, y aprender y hablar de temas incómodos o polémicos en un ambiente seguro, respetuoso y solidario. Y subrayan la importancia de que aprendan de que la ciencia puede beneficiar a la sociedad o dañarla dependiendo del uso que se le dé.

Numerosas encuestas en muchos países mostraron que un número creciente de científicos está abierto a encarar tareas de divulgación orientadas a niños. Por ejemplo, una reciente encuesta en España revela que entre el 70 y el 80 por ciento de los profesores universitarios e investigadores del Centro Superior de Investigaciones Científicas están dispuestos a participar en actividades de divulgación científica en las escuelas.

Sobre ciencia y chicos, vale destacar lo que dice Albert Einstein en una de sus cartas escritas a Otto Juliusburger: ” Aunque mortales como todos los demás, no importa cuánto vivamos, la gente como tú y yo no crecemos viejos …… [Nosotros] nunca cesamos de permanecer como niños curiosos ante el gran misterio en el que hemos nacido”.

REVISTA CHICOS

Ciencia Hoy de los CHicos, sale en venta en los kioscos cada cuatro meses: al comienzo de las clases, poco antes de las vacaciones de invierno, y hacia el final del ciclo lectivo.

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