¿Cómo se puede transformar una célula de la piel en una neurona? Usando técnicas desarrolladas por los últimos Nobel de Medicina, una asociación sin fines de lucro integrada por el Instituto Leloir, FLENI y la empresa VEINFAR ofrecerá a partir de 2013 servicios destinados a grupos de investigación, centros clínicos y la industria farmacéutica.

(17/10/12 – Agencia CyTA-Instituto Leloir)-. Las técnicas desarrolladas por los ganadores del Nobel de Medicina 2012, el japonés Shinya Yamanaka y el británico John Gurdon, serán empleadas en la Plataforma de Células Madre Reprogramadas Humanas (PLACEMA) que va a funcionar en la Argentina. La tecnología de reprogramación ya se halla disponible y se espera que comience a ofrecer los servicios a principios del 2013.

El equipo de Yamanaka, científico de la Universidad de Kyoto, introdujo cuatro genes y logró convertir así células de piel en otras con capacidades similares a las embrionarias, las cuales pueden luego diferenciarse en neuronas y células cardíacas o hepáticas, entre otras. El estudio, publicado en hace cinco años en la revista “Cell”, ofreció una alternativa éticamente menos controvertida al uso de células madres embrionarias. PLACEMA ahora va a ofrecer en el país ese servicio de reprogramación celular destinado a grupos de investigación, a la clínica y a la industria farmacéutica.

“Habrá tres tipos de servicio”, explicó a la Agencia CyTA el doctor Fernando Pitossi, director del Laboratorio de Terapias Regenerativas y Protectoras del Sistema Nervioso del Instituto Leloir y director ejecutivo de la asociación.

Una propuesta consiste en tomar células de la piel de pacientes y convertirlas en las células de estudio de la enfermedad que los afecta. Por ejemplo, neuronas en el caso del Parkinson.

Otra oferta es la generación de un banco de células cardíacas, hepáticas y neuronales que represente a nivel celular a la población argentina para realizar testeo de drogas y ensayos de toxicidad. “Iniciativas similares ya se hallan en curso en Japón, Estados Unidos y diversos países de Europa”, señaló Pitossi, quien es investigador del CONICET y coordinador del Consorcio de Investigación en Células Madre (CICEMA), integrado por una decena de instituciones académicas y compañías privadas.

El tercer servicio está enfocado a generar células de reemplazo para terapias regenerativas, pero, eso sí, en condiciones experimentales, bajo protocolos estrictos y con la autorización del INCUCAI.

“Hay muchos tratamientos no autorizados y con fines de lucro que son presentados como la cura o la mejora de la calidad de vida a pacientes y familias en una situación de alta vulnerabilidad, pero ninguno ha probado tener beneficios establecidos”, puntualizó. “Por el contrario, existen múltiples evidencias trágicas de los peligros que conlleva apartarse de este camino.”

PLACEMA es una asociación sin fines de lucro integrada por la Fundación Instituto Leloir (FIL), FLENI y la empresa VEINFAR, que se encarga de desarrollar los controles de calidad necesarios para la producción de células bajo buenas prácticas compatibles con su uso clínico. Surgió a partir de un subsidio del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de Argentina y su directorio ad-hoc está integrado por Gustavo Sevlever por FLENI, Jorge Daniele por FIL y Abel Camps por VEINFAR.

foto PLACEMA

El doctor Fernando Pitossi, director ejecutivo de la Plataforma de Células Madre Reprogramadas Humanas (PLACEMA).