Moléculas que imitan a los glóbulos rojos fueron desarrolladas por investigadores de la Universidad de Carolina del Norte, en Estados Unidos. Podrían servir como sistemas eficaces de transporte de medicina en el organismo a fin de tratar enfermedades como el cáncer. Fueron testeadas en ratones.

(08/04/11 – Agencia CyTA-Instituto Leloir)-. Micropartículas sintéticas que imitan a los glóbulos rojos fueron desarrollados por investigadores de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill, Estados Unidos. Los resultados del avance científico fueron publicados en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.

De acuerdo con los investigadores su trabajo es una contribución en el camino que apunta a la creación de sangre sintética, la cual puede tener varias utilidades desde el punto de vista médico para tratar diversas enfermedades como el cáncer, entre otras. “Desde el comienzo la creación de partículas con capacidad para desplazarse por el sistema sanguíneo para el desarrollo de sistemas de transporte de drogas ha sido significativo”, afirma en el portal de esa universidad uno de los autores de dicho trabajo, el doctor Joseph DeSimone.

Con nanotecnología

Timothy Merkel y sus colegas, del laboratorio de DeSimone, crearon moldes de dimensiones nanométricas (un nanómetro equivale a la mil millonésima parte de un metro) y los llenaron con una solución de hidromel para desarrollar los glóbulos rojos sintéticos.

Posteriormente, el equipo de científicos estudió la viabilidad de esos glóbulos rojos sintéticos en ratones. Las más flexibles llegaron a circular en su sistema sanguíneo por un período de 93 horas, mientras que las más rígidas circularon cerca de casi tres horas.

Tras obtener estos resultados, los autores del trabajo pretenden seguir realizando investigación básica para que algún día sus avances puedan trasladarse a la medicina.

 Foto SANGRE SINTETICA

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Micropartículas sintéticas que imitan a los glóbulos rojos fueron desarrollados por investigadores de la Universidad de Carolina del Norte

Créditos: Timothy J. Merkel y Joseph M. DeSimone, Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill.