Las estadísticas oficiales de mortalidad, en Argentina, Chile y Uruguay, indican que las enfermedades cardiovasculares constituyen la primera causa de muerte en la región. Con el objetivo de investigar y contribuir a la resolución de esa problemática iniciarán un estudio que abarcará una población de 8 mil adultos de los tres países mencionados. La investigación será coordinada por expertos del recién inaugurado Centro de Salud Cardiovascular para América del Sur.

(10/06/09 – Agencia CyTA-Instituto Leloir) – De acuerdo con las estadísticas oficiales de mortalidad, en Argentina, Chile y Uruguay, las enfermedades cardiovasculares como- el infarto de miocardio, los accidentes vasculares cerebrales y otras enfermedades producidas por la aterosclerosis y sus factores de riesgo como la presión arterial alta, el colesterol elevado, la diabetes, la obesidad, el tabaquismo, el sedentarismo y la dieta no saludable- constituyen la primera causa de muerte en la región, representando más de un tercio de los decesos en estos países.

“Se estima que la mortalidad por accidentes coronarios y cerebrovasculares se incrementará entre 1990 y 2020 alrededor de dos veces y media en América Latina, mientras que sólo en los países desarrollados el aumento será de solo un tercio”, señala el doctor Adolfo Rubinstein, presidente del Instituto de Efectividad Clínica y Sanitaria (IECS / www.iecs.org.ar) y profesor titular de Medicina Familiar y adjunto de Salud Pública de la. Facultad de Medicina de la UBA. Y agrega: “A pesar de la alta carga de enfermedad cardiovascular en los países del Cono Sur, con su correspondiente impacto sanitario, social y económico, la mayoría de los programas y recursos públicos de promoción de la salud y prevención de la enfermedad siguen casi exclusivamente dedicados al combate de las enfermedades infecciosas y perinatales”.

A fin de fortalecer, a nivel nacional y regional, la lucha contra la epidemia de las enfermedades cardiovasculares, se inauguró el Centro de Excelencia en Salud Cardiovascular para América del Sur (CESCAS) en el IECS, con sede en Buenos Aires. Este Centro surge luego de que el IECS, institución argentina sin fines de lucro dedicada a la investigación y educación, fuera seleccionado para la creación de un centro coordinador del proyecto, a partir de la iniciativa del Instituto Nacional del Corazón, Pulmón y Sangre (NHLBI) que pertenece a l Instituto Nacional de Salud de los Estados Unidos (NIH, según sus siglas en inglés).

La iniciativa del NHLBI y la creación de este Centro de Excelencia fueron destacadas en la edición del día 10 de junio de 2009 de la revista científica The Lancet.

Consorcio del Cono Sur

En su primera etapa, planean realizar un estudio epidemiológico a fin de evaluar el riesgo cardiovascular de un amplio grupo poblacional en cuatro localidades de la Argentina, de Uruguay y de Chile.

En este proyecto de gran magnitud, coordinado por el IECS, participará la Escuela de Salud Pública y Medicina Tropical de la Universidad de Tulane, Estados Unidos, la Universidad de La Frontera (UFRO), Temuco, Chile, y la Universidad de la República (UdelaR), Canelones, Uruguay.

“El objeto fundamental del estudio es determinar a través del tiempo el verdadero impacto clínico y sanitario de los factores de riesgo cardiovascular, incluyendo también su impacto social y económico. En una primera etapa estudiaremos el impacto de los factores de riesgo conocidos (la presión arterial alta, el colesterol elevado, la diabetes, el sobrepeso y la obesidad, el tabaquismo, el sedentarismo y la falta de una dieta saludable), en poblaciones seleccionadas al azar entre adultos que vivan en 4 ciudades de nuestra región: Bariloche y Marcos Paz en Argentina, Temuco en Chile y Pando en Uruguay”, indica Rubinstein quien también se desempeña como Jefe de Medicina Familiar y Preventiva del hospital Italiano de Buenos Aires.

Por su parte, la doctora Vilma Irazola, especialista en cardiología de la UBA, coordinadora académica de la Maestría en Efectividad Clínica de la Facultad de Medicina de la UBA e investigadora del IECS, resalta que la importancia del estudio se centra en que si bien en el Cono Sur y especialmente en la Argentina se dispone de datos sobre la frecuencia y distribución de estos factores de riesgo a nivel poblacional, se sabe en realidad muy poco sobre el impacto que tienen a lo largo del tiempo en cuanto a mortalidad y discapacidad a causa de enfermedades cardiovasculares. “Casi todas las estimaciones se extrapolan de otros estudios realizados en países desarrollados como Estados Unidos. Los resultados en otros países, más cuando son países de altos ingresos y desarrollo, no necesariamente reflejan la realidad en países de medianos ingresos y realidades distintas como los nuestros”, explica la experta.

Seguimiento de 4 años

La investigación epidemiológica incluirá un seguimiento de 8 mil adultos en los 4 sitios del estudio por un mínimo de 4 años en la primera fase. “Será población seleccionada aleatoriamente que participará con su consentimiento y tendremos en cuenta la información hospitalaria relevante, asociada a infartos y accidentes vasculares cerebrales, entre otras complicaciones. También realizaremos encuestas a los participantes sobre hábitos de vida y salud”, indica Irazola.

Asimismo, el análisis de las muestras de sangre de la población, obtenidas en los tres países, se centralizará en el laboratorio de análisis clínicos del Hospital Italiano de Buenos Aires, a fin de ser procesados.

“Tanto para la Argentina como para el Cono Sur, tener un Centro de Excelencia focalizado en la implementación de proyectos de investigación, la formación de investigadores y la promoción de estilos de vida saludables, impactará en el mejoramiento de la salud cardiovascular en nuestra población, teniendo en cuenta que las enfermedades cardiovasculares son la primer causa de muerte en la región”, indica el doctor Rubinstein. Y agrega: “Al mismo tiempo, esperamos que esta iniciativa fortalezca los objetivos de trasladar el conocimiento generado por las investigaciones, a políticas sobre asignación de recursos informadas por la evidencia y adaptadas al contexto específico de los tres países que trabajarán en esta iniciativa”.

Recuadro

La opinión de algunos de los principales actores

Para el doctor Matías Calandrelli, médico cardiólogo del Servicio de Cardiología del Sanatorio San Carlos, en la ciudad de Bariloche, y uno de los investigadores principales del estudio, “el mejor conocimiento de nuestra población y el diagnóstico de los problemas específicos en esta área en nuestro medio, permitirá establecer pautas propias de control y prevención de las enfermedades cardiovasculares”.

Callandrelli, quien también es miembro directivo de la Sociedad Argentina de Cardiología, junto a un equipo de trabajo, recolectará datos de dos mil individuos de la ciudad de Bariloche.

Según el doctor Héctor Horacio Olivera, Secretario de Salud Pública Comunitaria del Municipio de Marcos Paz, provincia de Buenos Aires, que coordinará el proyecto en esa ciudad, “el estudio irá generando múltiples evidencias para el conocimiento y la toma de decisiones que favorecerán la calidad de vida de las poblaciones disminuyendo la alta carga actual y proyectada de enfermedad cardiovascular”, enfatiza el especialista.

Fernando Lanas Zanetti, especialista en cardiología de la Universidad de La Frontera, Temuco, Chile, destaca que “los resultados del estudio serán útiles para las decisiones de las autoridades de salud para enfrentar la epidemia de enfermedades cardiovasculares en nuestro país. Además el resultado conjunto del estudio en Argentina, Uruguay y Chile tendrá repercusiones sobre el conocimiento de estos factores y su control en toda la región”.

De acuerdo con el doctor José Aníbal Manfredi, cardiólogo del hospital de Clínicas de la Universidad de la República del Uruguay y director de Prevención Cardiovascular de Pisabarro Centro Metabólico, uno de los puntos de relevancia del proyecto regional reside en que “de no mejorar la tendencia actual, al menos la mitad de la población del Uruguay padecerá una enfermedad cardiovascular y uno de cada 3 habitantes fallecerá de causa cardiovascular”.

“Otros dos objetivos clave del proyecto son la capacitación de profesionales de la salud en el área de epidemiología y la realización de actividades de entrenamiento en promoción y educación para la salud para agentes comunitarios de la ciudades seleccionadas, a fin de concientizar a la población sobre la necesidad de adoptar hábitos de vida saludables”, concluye Irazola.