Se acaba de publicar el sondeo digital más amplio de la Vía Láctea hasta el momento. Este mapa apunta a revelar la estructura a gran escala y las características que se dieron en la formación de nuestra galaxia. La tecnología utilizada permite observar sucesos singulares como estadios tempranos y tardíos en la evolución estelar.

(11/12/07- Agencia CyTA-Instituto Leloir) – Una colaboración de alrededor de 50 astrónomos, el consorcio IPHAS (siglas en inglés de INT/WFC Photometric H-alpha Survey of the Northern Galactic Plane), conducido desde el Reino Unido, con socios en Europa, Estados Unidos y Australia, presentó ayer (10 de diciembre) el primer sondeo óptico digital de gran parte de nuestra galaxia, la Vía Láctea.

Mediante la observación de la luz emitida por los iones de hidrógeno (la H-alpha, visible en la zona roja del espectro electromagnético), con el Telescopio Isaac Newton en La Palma (España), se obtuvieron imágenes de impresionantes nébulas –nubes de polvo interestelar de gas de hidrógeno y de plasma– y estrellas. Las nébulas son la primera etapa del ciclo de formación de las estrellas.

La descripción de esta ampliación del mapa galáctico fue publicada en la revista científica “Monthly Notices of the Royal Astronomical Society”.

Esta entrega inicial de datos corresponde a observaciones del plano norte de la Vía Láctea, que cubre un espacio de 1600 grados cuadrados. La resolución de la imagen es lo suficientemente alta como para permitir la detección de estrellas individuales que exhiben emisiones H-alpha (sensible a la emisión del hidrógeno en la parte roja del espectro) que los mapeos de más baja resolución espacial ya conocidos.

El nuevo catálogo de IPHAS que se acaba de presentar incluye cerca de 200 millones de objetos únicos. Este inmenso recurso fomentará los estudios que pueden abarcar a la vez aspectos amplios y también sutiles de la composición estelar de la Vía Láctea y de su estructura tridimensional.

La profesora Janet Drew, de la Universidad de Hertfordshire, en el Reino Unido, dijo al respecto: “Al usar el marcador distintivo del hidrógeno podemos mirar a algunas de las estrellas menos comprendidas en la galaxia, aquellas en etapas muy tempranas o tardías de sus ciclos vitales”. Como este tipo de estrellas representa menos del 0,1 por ciento del total, poder escudriñar con este grado de definición implicará un cambio sustantivo a la hora de interpretar los eventos que se suceden en nuestra galaxia. “Los datos de IPHAS mejorarán enormemente el cuadro que tenemos de la evolución estelar”, auguró Drew.

El programa IPHAS está enmarcado dentro de una nueva modalidad en la astronomía que implica la posibilidad de compartir bases de datos. Su información está disponible a través de la Web y también a través de la interfaz del Virtual Observatory –una iniciativa internacional que apunta a proveer acceso estándar a las bases de datos astronómicas de todo el mundo–, donde puede cruzarse automáticamente con los datos de otros catálogos relevantes.

Nic Walton de la Universidad de Cambridge, en el Reino Unido, expresó: “Emplear el estándar de la interfaz del Virtual Observatory es un modo muy efectivo de explotar los datos del sondeo de IPHAS. Este es un sustancial y significativo mapa galáctico, que apunta a contener unos 800 millones de objetos”.

“El acceso a través del Virtual Observatory abre una gama completa de opciones de análisis y puede permitir a los astrónomos hacer un mayor uso de la información.

IPHAS es el sistema de datos más grande publicado a través de la interfaz del Virtual Observatory hasta la fecha, es como un heraldo de lo que vendrá en el escrutinio de datos astronómicos”, añadió.

Según los expertos, la base de datos de IPHAS, de alguna manera, muestra una nueva ciencia, caracterizada por una súper abundancia de datos que deben ser catalogados para su posterior utilización en distintos contextos informativos. Por ejemplo, un grupo de la Universidad de Southampton, en el Reino Unido, que integra el programa IPHAS, lideró un arduo trabajo para distinguir y catalogar la línea de emisión H-alpha más brillante de estrellas revelado hasta ahora. Esta lista, de cerca de 5000 objetos, es la más amplia de este tipo. Esta observación de objetos especiales a través del cielo norte rastrea “puntos calientes” de estrellas formadas recientemente en nuestra galaxia de manera mucho más convincente de lo que ha sido posible hasta ahora.

El sondeo IPHAS será eventualmente extendido para abarcar por completo nuestra galaxia, con una cobertura de cerca de 4000 grados cuadrados. Por comparación, la Luna en el cielo vista desde la Tierra cubre cerca de 0,1 grados cuadrados.