Conociendo los factores que los originan y adoptando las medidas adecuadas, pueden evitarse muchos problemas de salud congénitos. Redes internacionales, que integran centros como el ECLAMC de La Plata, recopilan e intercambian información sobre los casos detectados, para tratar de establecer relaciones de causa – efecto.

(9/2/07 – Agencia CyTA- Instituto Leloir. Por Irene Maier (CIC) – Entre el 5 y el 10% de los bebés del mundo nace con algún defecto congénito, que pudo originarse ya desde la concepción o bien durante el embarazo. Estos defectos abarcan desde la malformación de alguna parte del cuerpo hasta trastornos de funcionamiento, tales como retardo mental, ceguera o sordera. Los más frecuentes en nuestro país son el \”síndrome de Down\”, las malformaciones del sistema nervioso central y el \”labio leporino\”.

Algunos de estos problemas tienen un origen genético conocido, pero en otros casos los responsables son enfermedades, carencias alimentarias de los padres, ingestión o exposición a ciertas sustancias, radiaciones, etc.

Como muchos defectos pueden prevenirse conociendo los factores que los originan, se crearon redes internacionales de centros que recopilan e intercambian información sobre los casos detectados, para tratar de establecer relaciones de causa – efecto. En nuestra región cumple esta función el ECLAMC (Estudio Colaborativo Latinoamericano de Malformaciones Congénitas), que fue creado en 1967 por un médico argentino, el doctor Eduardo E. Castilla.

Medidas de prevencion

Uno de los centros argentinos del ECLAMC está ubicado en La Plata, en el IMBICE (Instituto Multidisciplnario de Biología Celular – subvencionado por la CIC y el CONICET). Dos de sus integrantes, el doctor Jorge S. López Camelo y la licenciada Hebe Campaña, nos indican diversas medidas que pueden prevenir malformaciones.

Entre las que deberían tomar los sistemas de salud se cuentan:

* Propiciar que se vacune a los niños y a las mujeres en edad fértil -no embarazadas- contra la rubéola (enfermedad que puede causar sordera, ceguera o problemas cardíacos al feto)

* Recetar a las embarazadas sólo los medicamentos imprescindibles

* Realizar un control prenatal cuidadoso

* Considerar que cualquier mujer en edad fértil puede estar embarazada, para tomar las precauciones adecuadas en los tratamientos.

Por su parte, las mujeres pueden disminuir riesgos si procuran que sus embarazos se produzcan antes de cumplir los 40 años, ya que las que superan esa edad dan a luz a un tercio del total de los niños con síndrome de Down.

Los expertos recomiendan a las embarazadas: cumplir con los controles prenatales indicados por su médico, abstenerse de tomar medicamentos no recetados, no fumar ni permanecer en ambientes donde se fuma y no ingerir alcohol o cualquier tipo de droga. Además, les aconsejan consultar si el trabajo que realizan puede perjudicar al embarazo.

Finalmente, se subraya la importancia de ingerir alimentos variados, sobre todo frutas y verduras, porque la subalimentación o la falta de vitaminas pueden afectar al feto.

En especial, si una mujer llega al embarazo con un nivel insuficiente de ácido fólico (vitamina del grupo B), pueden producirse defectos en el sistema nervioso del bebé, ya que esta sustancia es esencial para su desarrollo desde el comienzo de la gestación.

Más información: www.eclamcnet.net