La Clínica Mayo de Arizona, Estados Unidos, ha realizado más de mil procedimientos con una cápsula del tamaño de una píldora dotada con una diminuta cámara de video que al ser ingerida por los pacientes registra imágenes nítidas del estómago, del colon y de las paredes intestinales. La inventó en el año 2000 un médico británico para realizar diagnósticos más precisos.

(12/10/06 – Agencia CyTA- Instituto Leloir. Por Bruno Geller)- La Clínica Mayo de Arizona, Estados Unidos, ha realizado más de mil diagnósticos gastrointestinales con un invento que hace unos años parecía ser tan sólo un cuento de ciencia ficción, según revela un comunicado de prensa de septiembre de esa misma institución.

Paul Swain, ingeniero y gastroenterólogo, inventó en el 2000 una milimétrica cámara de video que permite obtener imágenes nítidas del aparato gastrointestinal.

La cámara está dentro de una cápsula, que además contiene una luz, una batería y un transmisor. Una vez que el paciente la traga con la ayuda de un vaso de agua, una serie de sensores ubicados en su torso empiezan a registrar las imágenes. La potencia de las señales que envía la cápsula a este mecanismo receptor es lo que permite calcular su posición exacta en cada momento.

El estudio es indoloro y el paciente puede continuar con su vida cotidiana sin necesidad de permanecer en el hospital.

Posteriormente, la cápsula se expulsa a través de las heces. El paciente regresa al hospital y los gastroenterólogos proceden a analizar las imágenes en color de alta resolución –aproximadamente 50 mil – que son descargadas en una computadora.

El método posibilita la realización de diagnósticos más exactos de problemas como úlceras, malformaciones vasculares y poliposis, un trastorno que puede conducir al desarrollo de cáncer de colon. El estudio también permite diagnosticar con exactitud la enfermedad de Crohn, una enfermedad crónica en la cual el sistema inmunológico del individuo ataca su propio intestino produciendo inflamación.

“Es uno de los avances más revolucionarios en el campo de la gastroenterología de los últimos cincuenta años”, afirmó David Fleischer, director del servicio de gastroenterología de la Clínica Mayo en Arizona, en relación al invento de Swain.

Los médicos de esa clínica destacan la utilidad de la cápsula endoscópica, pero enfatizan que no es un sustituto de la Endoscopia gastrointestinal tradicional.