Serie: Los medicamentos / Su transformación en el gran laboratorio.

(14/12/11 – Agencia CyTA – Instituto Leloir. Por María Cristina Chaler)-. El medicamento es un producto que fabrica el hombre y lo diseña para que  alivie síntomas, cure o prevenga enfermedades. La mayor o menor efectividad de su acción depende de muchos factores, entre ellos las vías de ingreso al organismo, su absorción, distribución y la individualidad de cada paciente.

El fármaco es una molécula que se diseña con diferentes características según el lugar en donde deba actuar y generar la respuesta de acción. Cuando penetra en el organismo debe franquear barreras que éste le ofrece a su paso como defensa ante  una sustancia que resulta extraña.

La sangre es la encargada de  transportarlo hasta el lugar de acción, cuando pasa por el hígado, purificador de toxinas, los procesos químicos destruyen gran parte de la dosis ingresada y  así se transforma en mayor o menor grado en otras sustancias llamadas metabolitos  que pueden llegar a ser activos terapéuticamente o no. No sólo  el hígado transforma, sino que en menor proporción otros órganos y algunos tejidos también lo hacen generando sustancias que pueden ser inactivas, beneficiosas, tóxicas y hasta a veces cancerígenas. Así en el diseño de un fármaco es necesario tener en cuenta la biotransformación que provoca el metabolismo biológico.

El fármaco siempre es un toxico para el organismo, al medicar hay que evaluar costos y beneficios, los medicamentos no son panaceas, la automedicación sin el control de un profesional capacitado resulta muy peligrosa. Se distribuyen en todo el organismo y los tejidos los modifican químicamente  (biotransformación) en otras sustancias  que pueden llegar a ser perjudiciales para la salud.

El cuerpo humano es un gran laboratorio y todo lo que ingresa en él sea químico o biológico es transformado como protección. Se desencadenan reacciones químicas (vías metabólicas) como defensa contra toda sustancia extraña que se presente .La entrada moviliza una serie de procesos y la sustancia será transformada en otras para  ser eliminada por la orina o través de los riñones, por materia fecal o por otra vía de eliminación.

Esta biotransformación  se produce sobre todo en el hígado, pero también en riñón, intestino y en algunos tejidos y depende  de una serie de factores:

La edad: en  un recién nacido  la capacidad de biotransformación es pobre porque aún la bioquímica es incipiente y va aumentando hasta llegar a ser máxima en el adulto joven.

El anciano tiene disminución de las biotransformaciones que junto con una marcada disminución de las funciones renales, aumenta el riesgo de intoxicación medicamentosa por acumulación del fármaco.

El sexo: La diferencia de sexo influye en la biotransformación farmacológica y en los niveles que el medicamento alcanza en el plasma (nivel plasmático) por la influencia del predominio hormonal diferente entre hombres y mujeres.

Genética: Se ha comprobado que los mecanismos biotransformantes dependen del bagaje genético de cada individuo. Pueden aumentar la biotransformación favoreciendo la eliminación y destrucción del medicamento o bien la disminuyen aumentando la concentración del mismo y  en consecuencia el riego de intoxicación.

Enfermedades: las enfermedades previas  que un paciente sufra influye sobre el metabolismo en forma diferente e igualmente en los mecanismos de destrucción de la droga. La presencia de otros fármacos pueden también modificar las respuestas terapéuticas.

Dieta: los alimentos son fármacos naturales que interaccionan con los receptores celulares de los tejidos e interfieren de diferentes maneras con los distintos fármacos, de modo que es importante  a la hora de un tratamiento terapéutico tener en cuenta los alimentos que el paciente ingiere. La dieta influye sobre la biotransformación del medicamento y en consecuencia sobre la acumulación toxica del mismo.

Ambiente: las sustancias contaminantes del medio ambiente que inhalamos o ingerimos inducen mecanismos de desintoxicación aumentando los procesos metabólicos sobre todo en el hígado y en algunos tejidos. Esto hace que estén potenciadas algunas reacciones químicas para la destrucción rápida del fármaco y disminuyen su biodisponibilidad resultando a veces la dosis ingerida pobre para la acción que debe cumplir.

El organismo biológico es un complejo laboratorio de reacciones químicas  llamadas vías metabólicas que tienen como objetivo mantener el estado de salud. Ante la presencia de cualquier sustancia extraña sea biológica o no, todo el sistema se pone en acción de defensa para eliminarla. Es importante en farmacología conocer estos mecanismos para diseñar medicamentos adecuados que generen metabolitos no tóxicos. Muchas veces  la biotransformación es la que fabrica el  medicamento que generará la respuesta terapéutica.