Los cetáceos que habitan en aguas del territorio argentino serán censados en forma sistemática. Ese es el objetivo de un acuerdo entre el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, la Secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la jefatura de gabinete de ministros y la Prefectura Naval Argentina. La información obtenida estará accesible a la comunidad científica argentina, y entre otros propósitos, servirá para desarrollar políticas de conservación de esas especies.

(08/06/09 – Agencia CyTA-Instituto Leloir) – Un convenio que coordinará labores de observación dirigidas al reconocimiento e identificación de las distintas especies de cetáceos en aguas del territorio argentino fue firmado por el Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto (MRECIC), la Secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la jefatura de gabinete de ministros y la Prefectura Naval Argentina (PNA).

“Es muy importante hacer censos globales de la población de estos animales. Si uno sabe cuántos son y dónde habitan, uno puede orientar investigaciones científicas. Además si conocemos la biología y los requerimientos ecológicos de los cetáceos, estaremos también en mejores condiciones de promover su conservación como especie. Contar con un censo de las diversas especies de ballenas, delfines y orcas, y otros cetáceos, nos permitirá diseñar y fortalecer políticas de manejo dirigidas a su conservación”, señaló luego de la firma del convenio a la Agencia CyTA el doctor Javier Figueroa, comisionado alterno argentino del MRECIC ante la comisión Ballenera Internacional.

Para la comunidad científica

El acuerdo firmado establece, entre otras cosas, la realización de cursos y talleres de capacitación al personal de PNA para que en el ámbito de sus competencias de vigilancia y control de los espacios marítimos y fluviales de jurisdicción argentina, cuenten con los medios necesarios para realizar monitoreos del estado de las poblaciones de cetáceos. “PNA, desde sus instalaciones terrestres, y en aquellos patrullajes con medios de superficie y aéreos que realice, anotará en cartillas de identificación datos relacionados con especies identificadas y el lugar dónde fueron avistadas, indicó Figueroa.

La información será volcada a una base de datos electrónica. El MRECIC y la Secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable atenderán el mantenimiento y funcionamiento de ese archivo. La información recopilada en dicha base será volcada al Sistema de Información Costero Marino. “Esta información estará accesible a la comunidad científica argentina y servirá, entre otras tareas, para presentar informes periódicos a la Comisión Ballenera Internacional y a otros organismos que se dedican a proteger y trabajar en aras de la conservación de los cetáceos y que luchan contra el otro bando, es decir, aquellos que están a favor de su caza para diversos fines”, explicó Figueroa.

Para Figueroa es de vital importancia preservar a esas especies que forman parte de la biodiversidad del planeta. “Por otra parte, estas especies generan riqueza y empleo en forma directa e indirecta: el turismo, la venta de pasajes, hoteles, y otras actividades económicas, producen una ganancia aproximada de 70 millones de dólares anuales”,