Es una enfermedad altamente destructiva que afecta a los cítricos en diferentes regiones del mundo, y a Brasil desde el 2004. En la Argentina, hay temor por el potencial ingreso de la bacteria que causa Huanglongbing. Hace pocos días, finalizó una recorrida por distintas regiones citrícolas del país con el objetivo de evaluar la situación y capacitar a los profesionales en el tema.
(13/06/08. Agencia CyTA-Instituto Leloir. Por Laura García Oviedo) – Hace cuatro años, Brasil publicaba el primer informe oficial sobre la incidencia de la enfermedad Huanglongbing en su territorio. En la actualidad, los países de la región, incluida la Argentina, están en alerta por la alta probabilidad de que esa enfermedad, que afecta a los cítricos, salte las fronteras.
Sucede que en este país se conoce la presencia, desde 1994, del psílido asiático o chicharrita de los cítricos (Diaphorina citri). Es el insecto que sirve de transporte o vector de la bacteria que causa Huanglongbing. Por eso, las autoridades agropecuarias temen que eventualmente, la bacteria llegue al territorio argentino. Sin ir más lejos, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) declaró el alerta fitosanitaria para esta enfermedad (Resolución SENASA Nº 458/05) en 2005.
“Huanglongbing es una peste centenaria muy destructiva de los cítricos y re-emergente en Asia y África. La única medida efectiva para el control del HLB es la prevención. Una vez ingresada la enfermedad a un país, hay que eliminar las plantas afectadas”, dijo a la Agencia CyTA la ingeniera agrónoma Norma Costa, de la Estación Experimental Concordia del INTA de Entre Ríos, miembro de la Comisión Organizadora de la XXX Jornada Citrícola Nacional realizada en mayo pasado en la citada ciudad.
Costa destacó que esa enfermedad afecta a todos los cítricos, al dejar las plantaciones en un estado improductivo o al causar directamente su muerte. Y agregó que una vez que se manifiesta la enfermedad, es necesaria la eliminación de las fuentes de diseminación: las plantas cítricas afectadas por HLB y/o la planta ornamental Murraya paniculata, vulgarmente conocida como Mirto, Murta, Citrus-Jazmín o Jazmín Naranja, que hospeda la bacteria causante y al insecto-vector.
“Esta planta ornamental es uno de los riesgos más grandes que tiene la citricultura argentina, al ser una especie muy utilizada en regiones cítricas del noroeste y noreste argentino. Se utiliza mucho para arbolado público o como planta ornamental para casas o jardines por lo vistoso y aromático de sus flores y frutos”, informó la ingeniera Costa.
El doctor Adrián Vojnov, director del grupo de Fitopatología Molecular de la Fundación Cassará, del Instituto de Ciencia y Tecnología “Dr. César Milstein”, explicó que la preocupación generalizada se debe en gran parte a que el vector está presente en la Argentina. “Aunque aún no se vieron plantas con síntomas, cuando estos aparezcan, ya va a ser tarde, porque el vector disemina la enfermedad muy rápidamente”, dijo. Por eso, destacó la importancia de la prevención.
“En la actualidad, en la Argentina no hay enfermedades similares a Huanglongbing. Están aquellas que generan pústulas o manchas sobre la superficie de las hojas y los frutos, pero no son enfermedades vasculares como Huanlongbing, donde la bacteria se multiplica en los vasos dañando a la planta”, agregó Vojnov, quien es además investigador del CONICET.
Existe un grupo de síntomas que delatan la enfermedad de Huanglongbing. El característico, pero no específico, es un “moteado difuso en las hojas, una mezcla de verdes sin una separación neta entre uno y otro”. Si se describe la enfermedad, hay otros rasgos como ser la fruta deformada, las semillas abortadas y la inversión de color en el fruto, entre otros.
Además, Vojnov planteó que en la actualidad, para otras enfermedades que ya afectan a los cítricos en la Argentina, como la cancrosis, no hay monitoreo sobre los árboles en la Argentina, sino que suele rociárselos con sulfato de cobre. “Se convive con las enfermedades tratando de controlarlas, y se seleccionan los frutos a ser exportados”, dijo Vojnov.
Por su parte, el investigador brasileño Alexandre Morais do Amaral, de la “Empresa Brasileira de Pesquisa Agropecuária” (EMBRAPA), señaló que, una vez que ya está afectando a una región, las principales medidas para combatir la enfermedad de Huanglongbing son: el aislamiento geográfico de la zona citrícola afectada por HLB, tener programas de certificación que aseguren la sanidad de las plantas y la producción de plantas cítricas en viveros protegidos con mallas anti-insectos.
“La industria de cítricos en Brasil es responsable de alrededor de 400 mil empleos y exporta cada año mil millones de dólares en jugo de naranjas congelado. Ha sido afectada profundamente por esta enfermedad, que es considerada como la más importante en cítricos en todo el mundo”, dijo Morais do Amaral, quien es experto en biotecnología en cítricos; y en la actualidad, trabaja en el Centro APTA Citros \”Sylvio Moreira”, una institución pública ubicada en el “cinturón cítrico” del estado de San Pablo.
Aún no hay una cura para Huanglongbing. Una vez manifestada es muy difícil de combatir. Por eso, los expertos remarcan que es crucial la prevención.
RECUADRO – PREVENCIÓN CÍTRICA AL DÍA
(13/06/08. Agencia CyTA-Instituto Leloir) – Las regiones citrícolas del norte argentino están en alerta por el posible ingreso de Huanglongbing al país. Se trata de la peor enfermedad de cítricos en el mundo. En ese contexto, en mayo pasado, se realizó la XXX Jornada Citrícola, en Concordia, Entre Ríos.
Algunos de los objetivos fueron evaluar la situación ante la presencia de la enfermedad de Huanglongbing en Brasil, analizar las estrategias en el control de la enfermedad en diferentes países afectados y capacitar a los profesionales agropecuarios sobre las características de la enfermedad, según informó a la Agencia CyTA la ingeniera agrónoma Norma Costa, del INTA Concordia.
En la Jornada participaron especialistas de Argentina, Francia, Brasil, Sudáfrica y Estados Unidos. “Uno de los más destacados disertantes fue el experto en Huanglongbing, el doctor Joseph Bové, profesor emérito de la Universidad de Bordeaux, Francia”, destacó Costa.
