En una nueva fase de exploración, la sonda “Deep Impact” de la NASA ayudará a los científicos a hallar nuevos planetas fuera del Sistema Solar. Hasta ahora se encontraron 200 planetas de este tipo y la meta a largo plazo es hallar un mundo parecido a la Tierra.

(08/02/08 – Agencia CyTA_Instituto Leloir) – La sonda “Deep Impact” (Impacto Profundo, en castellano) de la NASA se hizo famosa en julio de 2005 cuando lanzó un proyectil hacia el cometa Tempel 1 y de esa manera logró que los científicos recuperasen por primera vez polvo de ese tipo de objeto espacial. Ahora, la sonda tiene una nueva misión: sobrevolar el cometa Hartley 2 en octubre de 2010.

Mientras se dirige hacia ese objetivo, desde el 22 de enero uno de sus telescopios más poderosos monitorea a cinco estrellas en busca de planetas por fuera del sistema solar que integra la Tierra, o extrasolares. Estos mundos lejanos se caracterizan por ser gigantes como Júpiter o incluso más grandes.

La misión llamada “Epoxi”, es liderada por un equipo de la Universidad de Maryland, según informa un comunicado de prensa de la NASA. También tendrá como meta observar a la Tierra en longitudes de onda visibles e infrarrojas, y brindar esa información para futuras comparaciones con planetas parecidos a la Tierra.

“Estamos a la caza de planetas del tamaño de la Tierra, que orbiten algunas de las estrellas vecinas más cercanas”, dijo Drake Deming, uno de los investigadores principales de Epoxi.

Hasta la fecha se han descubierto 200 planetas extrasolares en el espacio. La mayoría de ellos se detectaron de manera indirecta, por la fuerza gravitacional que ejercen sobre la estrella que los acompaña. Por el contrario, hallarlos por observación directa es más difícil por el fuerte resplandor que emiten los astros, con excepción de las ocasiones en que hay un alineamiento y el planeta eclipsa a la estrella.

“Cuando el planeta está al lado de su estrella, el telescopio captura la luz combinada de ambos. En cambio cuando pasa cerca de su estrella, el telescopio sólo registra la luz solar. Si se resta la luz de la estrella de la luz combinada, lo que queda es la luz del planeta”, explicó Deming. Y agregó: “El análisis de la luz nos permitirá descubrir cómo son las atmósferas de estos planetas”.