El Instituto Nacional de Tecnología Industrial, junto a organizaciones empresarias, impulsó un proyecto que permite reutilizar el material de descarte de cubiertas. Además de evitar la contaminación, el proyecto tiene la virtud de proponer un modelo eficaz de gestión de los neumáticos de descarte.

(29-11-2007. Agencia CyTA-Instituto Leloir. Por Alejandro Manrique) – El Centro de Investigación y Desarrollo Tecnológico de la Industria del Caucho, perteneciente al Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), junto con empresas y agrupaciones empresarias, impulsó un proyecto de reglamentación y uso del material de descarte de cubiertas que constituye un modelo de gestión eficaz e integral.

La propuesta de gestión contempla la logística de recolección de los neumáticos en desuso (en forma separada del resto de los residuos) provenientes tanto de usuarios particulares como de empresas de transporte, gomerías y talleres de reconstrucción. Luego, en una planta industrial los neumáticos usados son transformados en trozos de goma, aptos para su utilización posterior.

Si se tiene en cuenta los volúmenes de producción destinados al mercado interno y a las importaciones, el descarte de neumáticos en Argentina, supera las 100 mil toneladas anuales, de las cuales 38 mil corresponden a la Capital Federal y el Gran Buenos Aires.

De acuerdo con datos de la Cámara de la Industria del Neumático, los porcentajes de distribución geográfica de residuos de neumáticos son: la región Central, con un 58 por ciento; el Noreste Argentino con un 18 por ciento; y las regiones de Cuyo, Noroeste Argentino y Sur con un 8 por ciento cada una.

Con estos datos en mano, el grupo de trabajo elaboró una propuesta de gestión integral de este residuo, destinada, en principio, al área metropolitana. Se evaluaron las condiciones en esta zona geográfica en cuanto a la disponibilidad de recursos y se determinó la necesidad de construir un centro de acopio de neumáticos usados para su posterior transformación y transferencia.

Modelo de gestión

Para llevar a cabo el proyecto, el INTI construyó una Planta de Tratamiento y Reciclado de Neumáticos en el Complejo Ambiental Norte III, Camino del Buen Aire.

La iniciativa comprende la creación de un plan nacional de recuperación de neumáticos, el desarrollo de emprendimientos para el aprovechamiento de este desecho y la promoción de la legislación ambiental adecuada.

El plan nacional contempla la confección de un análisis de las distintas regiones del país según los volúmenes de acumulación de unidades usadas, el sistema de recolección y clasificación de las mismas.

Además de construir y poner en marcha la planta, el INTI coordinó la comisión multi-sectorial que impulsó el llamado a licitación pública de CEAMSE (Coordinación Ecológica Área Metropolitana Sociedad del Estado) para la instalación de dicha planta.

La CEAMSE, al incorporar el tratamiento y reciclaje de neumáticos, suscribió un convenio con la empresa Regomax para la instalación y funcionamiento de la planta. Como empresa inversora, ésta garantiza el funcionamiento de la planta y la comercialización del producto, con pago de un canon anual a la CEAMSE. Este organismo aporta los terrenos por un lapso de 20 años y recibe en forma gratuita los neumáticos descartados por los usuarios y las empresas transportistas, que derivan a la planta trituradora, con un costo nulo de materia prima.

El INTI verifica la viabilidad técnica del proyecto y efectúa controles anuales. Junto con la CEAMSE, es el encargado de revisar la aprobación de las licitaciones a adjudicar y también realiza auditorías técnicas a la planta.

Ecología urbana

Mediante el reciclado se obtienen aceros de primera calidad, molidos de goma y residuos textiles. Una estimación del peso de los componentes de los neumáticos al final de su vida útil arroja una preponderancia marcada por la goma, seguida por los metales y los textiles. Los productos provenientes del neumático en una primera etapa de trozado, sin separación de tela y metal, pueden servir como combustible para cualquier tipo de caldera u horno que esté adaptado para quemar residuos sólidos sin contaminar el medio ambiente.

Al separar las partes del neumático se obtienen metal y residuos textiles reciclables, además de polvo de goma con el que se pueden obtener productos varios, como por ejemplo: alfombras para pisos, lomos de burro, amortiguación en canchas de césped sintético (utilizan casi 100 toneladas cada una), plásticos cargados, pistas para caballos de carrera (se comprobó que con polvo de goma los caballos tienen menos riesgo de contraer conjuntivitis), pisos de goma y asfaltos (contribuye fundamentalmente a la disminución de ruido y permite aumentar su durabilidad), entre otras.

La idea del INTI es poder desarrollar a futuro nuevas plantas de triturado y un marco legal para la Argentina y el Mercosur.

RECUADRO

Descarte de neumáticos, un problema mundial

La eliminación de neumáticos usados afecta al ambiente porque suelen terminar su vida útil en basureros sin control. El problema de la disposición final de los neumáticos fuera de uso no encontró hasta el presente una respuesta eficiente en el mundo.

Deshacerse de forma limpia de los neumáticos inservibles no es nada fácil. La quema de neumáticos emite a la atmósfera humos pesados con partículas de alquitrán que, a su vez, están contaminadas con otros compuestos que terminan sobre superficies domésticas y afectan algunos alimentos expuestos como el pan, frutas y verduras que se consumen crudas y transportan los contaminantes directamente a las vías digestivas. Además, estos gases y partículas de hollín pueden desencadenar crisis alérgico-respiratorias.

Como la combustión en hornos de alta calidad que garantiza un mínimo de emisiones resulta muy cara, año tras año, toneladas de neumáticos acaban sus días abandonados en campos y cunetas, o almacenados en vertederos que son verdaderos focos de contaminación. Todo esto sin contar el derroche que representa no aprovechar un material en cuya fabricación se invirtieron grandes cantidades de energía (para fabricar una rueda de camión se necesita medio barril de petróleo).