Una investigadora de la Universidad Nacional del Nordeste lleva adelante un trabajo en el que revisa las especificidades de las villas y los asentamientos del Gran Resistencia, realizando una caracterización y evaluación de esos procesos de ocupación de tierra que integran lo urbano y lo social de la problemática.

(15/8/07 – Agencia CyTA-Instituto Leloir. Por Amelia Presman -UNNE) – Un trabajo de la investigadora María Andrea Benítez -que articula líneas investigativas tanto del Centro de Estudios Sociales (CES) como del Instituto de Investigación y Desarrollo de Vivienda (IIDVi) Facultad de Arquitectura de la UNNE- evalúa las características de los asentamientos ilegales durante los años 1997 y 2002 en el Gran Resistencia (Chaco), y el modo en que éstos resultan ser el emergente de momentos histórico-sociales determinados.

Orígenes

Esos asentamientos locales tienen su correlato en toda Latinoamérica, donde fueron denominados de diversa manera:   \”villas miserias\”, \”callampas\”, \”favelas\”, \”pueblos nuevos\”, \”cantegrille\”, y han sido estudiadas desde distintas perspectivas y escalas, tanto desde las distintas miradas sobre la pobreza, marginalidad e informalidad, como desde la perspectiva del crecimiento urbano.

En Argentina, la generación de las \”villas miseria\” en los años \60 y \’70 era explicada en el marco del intenso crecimiento de las ciudades sede de industrias