153 millones de personas sufren defectos de refracción conocidos comúnmente como hipermetropía, miopía y astigmatismo, según revela un reciente estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Un simple examen de la vista y un par de lentes podrían corregirlos, pero millones de personas no acceden a esos servicios básicos.

(13/10/06 – Agencia CyTA-Instituto Leloir. Por Bruno Geller)– Un estudio auspiciado por la OMS revela que 153 millones de personas padecen defectos de refracción, es decir, problemas oculares que alteran la visión debido a que el ojo no desvía correctamente los rayos de luz que lo atraviesan.

Los tres defectos de refracción más frecuentes son la miopía que consiste en una dificultad para ver claramente los objetos distantes; la hipermetropía que se caracteriza por una dificultad para ver claramente los objetos cercanos y el astigmatismo que consiste en una visión distorsionada debido a la curvatura irregular de la córnea.

En varios casos, la visión borrosa puede llegar a ser tan intensa que puede producir ceguera funcional.

Un sencillo examen de la vista y un par de anteojos podría corregir esos trastornos, pero millones de personas que viven en países subdesarrollados carecen de esos servicios básicos, revela un comunicado de prensa de la OMS de octubre.

Los autores del estudio sostienen que sin la adecuada corrección óptica, millones de niños pierden oportunidades educativas, mientras que millones de adultos son apartados de sus vidas laborales, con consecuencias importantes desde el punto de vista económico y social.

De acuerdo a los datos estadísticos, al menos 13 millones de niños, de entre cinco y quince años, y 45 millones de adultos en edad laboral, de entre 16 y 49 años, están afectados por esos tipos de trastornos oculares.

La OMS estimó previamente que alrededor de 161 millones de personas estaban afectadas por problemas visuales como cataratas, glaucoma y degeneración macular, pero los defectos de refracción no estaban incluidos en esas estimaciones. Las últimas cifras obtenidas por ese organismo internacional se suman a las anteriores, lo que supone que alrededor de 314 millones de personas en todo el mundo tienen problemas oculares.

\”La corrección de los defectos de refracción es una intervención simple y barata en el cuidado de la vista\”, afirmó el doctor Serge Resnikoff, coordinador de la unidad de la OMS encargada de la Prevención y Gestión de las Enfermedades Crónicas y agregó que “ahora sabemos cuán extendido está el problema de esos trastornos oculares, especialmente en los países de ingresos medios y bajos; debemos redoblar los esfuerzos para que cada persona que necesite ayuda, la reciba.”